Por fin, con Milka Lukembila

Hace un año estuvimos viendo a Milka, y varias personas nos dijeron que nos olvidáramos… y que esa niña no saldría adelante. Desde Amigos de Monkole lo vimos claro y pusimos todo para curar a esta niñita, que desde los 10 días de su nacimiento prematuro, ha pasado por varias operaciones.

Ahora, un año después, y tras hacernos cargo del coste de la operación (superior a 2500$, y gracias a los calendarios y a todos vosotros) la vemos como una niña normal, un poco miedosa al ver a tanto blanco, y jugando con sus hermanitas. No hay más que ver la cara de la madre para darse que cuenta de que ha merecido la pena

Llegar al Congo siempre me parece algo increíble. Como humanidad, en este sentido, somos buenos: sales de Madrid, dejas dos maletas, cambias de avión, recorres más de 6000 km., aciertas con donde quieres ir, y te reencuentras con tus maletas… Gran precisión. Sin embargo luego ves que aquí hay cientos de miles de niños con enfermedades que se pueden curar, pero que poca gente hace algo para que ni siquiera ellos sepan que su enfermedad tiene curación… Algo falla, si no somos en eso igual de buenos que con la precisión de las maletas en un viaje en avión. quizá en este sentido, no somos tan buenos, y quizá este es el sentido importante.

 

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